Me piden, desde el cabildo menor de la Cofradía del Santísimo Cristo del Espíritu Santo, un saludo para los hermanos cofrades aprovechando este tiempo navideño y mi nombramiento como nuevo capellán de la cofradía.

No estoy acostumbrado a escribir, no me gusta. Prefiero hablar, el “cara a cara”. Espero que tengamos tiempo de conocernos. Por ahora: ¡Feliz navidad! para todos.

Este saludo que tantas veces oiremos y diremos estos días es mi deseo para todos los hermanos cofrades. Espero que lo recibáis agradecidos y lo deseéis, a todos, de una manera cordial. Tú que estás acostumbrado a llevar la luz por las calles de Zamora, acompañado a Cristo en su semana de pasión, puedes ser portador de esta luz que, viniendo de lo alto quiere, “acampar entre nosotros”.

Acoge al que es la Luz del mundo. Contempla, desde la fe, la obra de salvación que Dios ha diseñado para todo hombre, porque ama a todas sus “criaturas”. Da gloria a Dios en este tiempo en que celebramos la encarnación de todo un Dios hecho hombre. Cuanto más lo tengas como el único, el primero, más intenso será tu peregrinar al lado del crucificado en sus días de pasión y gloria.

Recibe un cordial saludo navideño. Desea a los tuyos una Feliz Navidad.

José María Diego Pascual.

Capellán de la Hermandad Penitencial

del Santísimo Cristo del Espíritu Santo y Párroco del Espíritu Santo